Uno de los momentos más tensionantes al interior de cualquier organización ocurre cuando se produce una crisis financiera.
En ese instante se evidencia un clima de estrés en todos los niveles de la empresa. El líder tiene que idear una estrategia de urgencia para evitar un efecto negativo en la productividad, mientras que los empleados perviven con la incertidumbre de la continuidad de sus labores diarias, ya que en cualquier momento puede generarse un despido masivo.
A raíz de esto, el líder de la compañía debe promover el ahorro en los momentos de bonanza para aminorar los efectos negativos en las crisis financieras, que ocasionalmente confluyen en quiebras irreversibles.
Si bien la tipología de ahorrar está definida como la acción de reservar una fracción de los ingresos ordinarios con el objetivo de solventar necesidades que se pueden presentar en el futuro, la mayoría de los emprendedores no tienen clara la forma en que deben efectuarlo; por ende, a continuación, se exhibirán algunos ítems que el empresario Jaime Esparza Rhénals ha puesto en práctica.
El exitoso fundador de la red de multiservicios más grande de Colombia es un verdadero experto en el tema del ahorro, puesto que ha sido capaz de reinventar su compañía en 3 ocasiones.
Gracias a su majestuosa resiliencia empresarial o capacidad para sobreponerse a los momentos de crisis, Jaime Esparza ha considerado indispensable conservar un pequeño capital de sus ganancias para reinvertirlo tiempo después en negocios de gran proyección, en incentivos económicos a sus empleados, en corregir falencias de infraestructura, en la apuesta de nuevas tecnologías, etcétera.
Para él, lo más importante es evitar a toda costa los gastos innecesarios, es decir, derrochar capital en aspectos que poco o nada le sirven a la empresa.
Dentro de este aspecto, el buen líder debe conocer a profundidad todo el dinero que entra y sale de la compañía. Un buen registro contable será de gran ayuda para evitar malos entendidos y proveerá información veraz sobre el estado real de las finanzas.