Construir un modelo de negocios exitoso no es fácil, las exigencias del mercado y los muchos competidores dificultan el proceso, es por eso que Jaime Esparza resalta la constancia como una característica que no puede faltar en quien decide emprender.
Para nadie es un secreto que aquellos que lograron alcanzar el éxito, se prepararon, lucharon y sin duda fueron insistentes para conseguir lo que se propusieron, lo anterior se define como constancia, poseer una voluntad inquebrantable y no permitir que nada los detenga.
Tras sufrir varios percances financieros, Jaime Esparza tuvo que continuar su lucha, levantarse y aprender de sus errores. El empresario puso a prueba su resistencia y constancia demostrando que los sueños son posibles de cumplir siempre y cuando tengamos un alma luchadora.
La inteligencia la poseen muchas personas, el dinero para desarrollar las ideas también, pero la constancia es una virtud que pocos saben explotar y que quienes lo hacen podrán abrir miles de puertas llenas de oportunidades para llevar a cabo sus ideales.