Aunque no nos guste, el temor hace parte de nuestra vida, este tipo de emoción nos paraliza y limita al enfrentar un problema específico o un panorama nuevo para nosotros.
Aquellos que decidieron ser emprendedores saben que no es fácil enfrentarse a sus temores, más aún cuando la estabilidad financiera depende de superar dicho temor; sin embargo, en el mundo de los negocios es importante tomar riesgos y aprender a lidiar con las consecuencias de los mismos.
Muchos de los casos en los que las personas no dan el paso al frente para desarrollar su idea de negocios se le atribuyen al temor a fracasar, lo que es completamente entendible ya que pocos pueden lidiar con malas noticias; no obstante, las personas que deciden arriesgarse encuentran respuestas, aun cuando estas no sean lo que esperaban.
Es importante aprender a diferenciar el temor y el miedo, ya que son dos panoramas diferentes pero que a su vez nos detienen en muchas oportunidades, El miedo es un sentimiento que nos protege de un peligro real, mientras que el temor es una emoción que nos hace escapar de peligros imaginarios.
Con lo anterior podríamos decir que al asistir a una entrevista de trabajo o al iniciar un proyecto de emprendimiento, nos llenamos de temores infundados que en la mayoría de los casos nos hacen cometer errores. Lo anterior se evita enfrentando las situaciones con calma y analizando los posibles escenarios antes de dar una respuesta o tomar una decisión.
Es importante que aprendamos a superar nuestros temores, ya que son sentimientos basados en cosas inexistentes y por tanto debemos eliminarlos de nuestra vida.